“Soy inocente”: Harvey Weinstein hace su alegato final en la sentencia

Harvey Weinstein

ha seguido declarando su inocencia después de que el productor de cine caído en desgracia fuera condenado a 16 años de prisión por violación y agresión sexual.

Durante su declaración final ante el tribunal, Weinstein se mantuvo firme en su inocencia y afirmó que “nunca violó ni agredió sexualmente a la desconocida 1” y que todo esto se debe a que la gente va detrás de su dinero. También argumentó que la mujer “es una actriz” y que se autolesionó antes de conocerle. Cree que todas las acusaciones vertidas contra él por sus víctimas son inventadas.

“Mantengo que soy inocente. Nunca violé ni agredí sexualmente a la desconocida 1. Nunca conocí a esta mujer, y el hecho es que ella no me conoce. Se trata de dinero y de ir a por mí.

“No violé a esta mujer. No vi a esta mujer. Ella cometió perjurio. Es una historia inventada. Con el debido respeto, Jane Doe 1 es una actriz y puede encender las lágrimas”.

Variety

informó de que Weinstein no se levantó para dirigirse al tribunal debido a su dolencia de columna, en su lugar, el hombre de 70 años se sentó mientras se dirigía al tribunal, defendiendo su inocencia. Dijo a los abogados y al juez que “no se merece” su condena y suplicó clemencia. También creía que había “demasiadas cosas mal” en el caso y que todo era un montaje.

“Por favor, no me condenen a cadena perpetua. No me lo merezco. Hay muchas cosas que están mal en este caso. No hay pruebas.

“Hay demasiadas lagunas. Demasiadas cosas mal en este caso. Esto no es verdad… Yo no estaba allí. Esto es un montaje. Esta no es la forma de actuar en esta situación. Pido clemencia”.

Weinstein fue acusado de abusos sexuales contra cuatro mujeres y declarado culpable en un caso. Fue condenado a ocho años por “cópula oral”, seis años por “penetración forzada con un objeto extraño” y dos años por violación. El total de estas condenas acumula 16 años de cárcel. Uno de los representantes de Weinstein consideró que la sentencia era “cruel” debido a su edad y a sus múltiples problemas de salud, y opinó que Weinstein estaba “atrapado en el lado equivocado de la cultura de la cancelación”.